Entre las leyendas que acunan el Castel Sant ‘Angelo, es necesario conocer algunas…Un famoso cantante italiano, Claudio Baglioni, en una de sus canciones más conocidas, hablaba de las historias de amor nacidas durante los paseos por la orilla del Tíber.
También en este artículo hablaremos de una historia de amor que duró unos dos milenios, marcada por el peso del tiempo y la cultura.
De hecho, hablamos del Castillo de Sant’Angelo, que podrás ver con toda seguridad durante uno de tus paseos por el Tíber, el río que baña la capital italiana.
Da un paseo a lo largo del río y encontrarás la entrada al Castillo de Sant’Angelo de Roma. Quizá después de visitar la Basílica de San Pedro, ya que el monumento se encuentra en los límites del Vaticano.
No podrás perderte esta imponente estructura circular con una forma especialmente curiosa que revela una maravillosa historia en su interior. En su cima encontrarás la majestuosa estatua de esculpida por Miguel Ángel especialmente para el Castillo de Sant’Angelo de Roma.
Debe su nombre a la calle en la que se encuentra; en Lungotevere Castello, 50 de Roma. Puedes llegar desde distintos barrios pero la estación de metro más cercana es sin duda Lepanto, situada en la línea A.
También hay autobuses y líneas turísticas que pueden llevarte al Castel Sant’Angelo (Castillo de San Ángel):
Si llegas a la estación de Termini, puedes tomar el autobús 70 durante 12 paradas hasta Via Vittoria Colonna y a 150 metros lo verás.
Parece que su nombre se inspiró en un suceso ocurrido en el año 590, cuando San Gregorio Magno organizó una procesión para derrotar a la peste que había asolado la ciudad.
Cuando llega al castillo durante la procesión, el Arcángel Miguel aparece en lo alto y anuncia el fin de la peste con su espada.
Por este motivo se cambió el nombre del Mausoleo de Adriano por el de Castel Sant’ Angelo.
Construido en época romana, 123 d.C., por el emperador Adriano, cuyo destino final sería el de mausoleo para albergar sus propios restos y los de su familia y, por supuesto, sus descendientes . La parte dedicada al mausoleo está ahora incorporada al castillo.
En su parte superior, presentaba una imponente estatua del emperador a caballo.
Su grandeza, su historia y la frescura con la que aparece a pesar de su antigüedad, nos recuerdan la razón principal por la que debemos visitarla: el arte.
El Castillo de Sant’Angelo nos introduce en un mundo antiguo que aún hoy domina y nos ofrece la mejor visión de la cultura romana. Visitar el Castillo de Sant’Angelo de Roma significa adentrarse en algo mágico y austero al mismo tiempo, inalterado por el tiempo.
Si vas a pasar unos días en Roma, la respuesta es obvia: visitar este lugar significa sumergirte de lleno en el arte, la cultura y el mundo romanos. Al entrar en el castillo, hoy convertido en museo, te sorprenderás muchas veces.
Una visita que comienza ya, como decíamos, desde las orillas del Tíber, de donde emerge con una grandeza verdaderamente gloriosa.
La visita puede entonces comenzar: estamos en el corazón del Castillo de Sant’Angelo, el Mausoleo domina inmediatamente ante nuestros ojos. Descendemos por la rampa helicoidal y diametral y podemos llegar a la Sala de las Urnas con la cámara funeraria de la familia imperial.
En su interior hay una espléndida lápida de mármol con un poema escrito por el propio Adriano para su alma.
Podemos leer :
«Pequeña alma perdida y gentil, compañera y huésped del cuerpo, descenderás ahora a lugares incoloros, dolorosos y desnudos, donde ya no tendrás las diversiones habituales».
Muy conmovedor e ilustre, Adriano fue un emperador despierto, capaz de grandes cosas y, sobre todo, un hombre de cultura. Con el tiempo, y en tiempos de Aureliano, es decir, en el siglo III d.C., el Mausoleo se convirtió en un puesto militar avanzado y dedicado a la seguridad de la ciudad.
Así, durante la visita, podremos comprobar lo cerca que está del Tíber y cómo precisamente pudo servir de fortaleza para la defensa de Roma.
A lo largo de los años, como veremos durante la visita, Castel Sant ‘Angelo ha sido la fortaleza de varios senadores como Teofilatto, los Crescenzi, los Pierleoni y también los Orsini.
El Último Orsini; fue también el Papa Nicolás III, fue él quien construyó un pasadizo que conectaba el castillo con el Vaticano: Passetto di Borgo.
A partir de 1300 se utilizó también como fortaleza para alojar a los papas durante los tiempos difíciles que vivió la ciudad. Durante una visita, uno se da cuenta de la belleza de los apartamentos construidos para alojarlos. Estos últimos fueron decorados a petición del papa Pablo III Farnesio en 1500, también por Rafael.
De hecho, hoy podemos visitar el Cortile dell’Angelo (Patio del Ángel) con la hermosa estatua de San Miguel Arcángel de 1544.
En su interior se encuentran también las Prigioni Storiche (Cárceles Históricas), salas en las que se alojaron personajes ilustres como Benvenuto Cellini, recordado como un gran hombre de estudios y un magnífico escultor.
En el castillo, también es posible visitar la terraza del Ángel, en lo más alto, donde podrás ver la estatua de bronce del Ángel realizada por Peter Anton Verschaffelt en 1752 por orden del Papa Benedicto XIV.
La azotea también es famosa por la ópera «La Tosca», en la que una joven se arroja desde el castillo tras enterarse de que su amado está encerrado en la mazmorra del castillo y es ejecutado poco después.
¿Cuánto cuesta la visita al Castillo de Sant’ Angelo? Precio ? Entradas ?
Para visitarla, puedes reservar tus entradas directamente en el sitio web de nuestro socio siguiendo el enlace que figura aquí. Entradas sin cola para Castel Sant’ Angelo.
El billete completo cuesta 15,00 euros y el de tarifa reducida 2 euros. Para obtener la mejor vista del lugar, puedes descargarte una aplicación gratuita en 7 idiomas diferentes.
El horario de visitas es muy flexible, de hecho puedes visitarnos:
¡Te deseamos una maravillosa visita a la ciudad y al Castillo de Sant’Angelo!